El papa Francisco salió este viernes del hospital Gemelli, en Roma, de buen humor y bromeando tras haber permanecido nueve días ingresado por una operación de abdomen. “Todavía vivo”, respondió el pontífice a una periodista que le preguntó cómo se sentía.
El papa Francisco salió, en silla de ruedas, a las 08:45 horas (locales) del Policlínico Gemelli, en cuyas puertas era esperado por una multitud de feligreses y periodistas. Bajo un fuerte dispositivo de seguridad, se entregó a algunos saludos y agradecimientos antes de subir a su Fiat 500 blanco para regresar al Vaticano, donde su evolución será vigilada de cerca ante un verano con una agenda cargada.
Está previsto que el pontífice celebre la oración del Ángelus el domingo, pero su audiencia general semanal del miércoles será cancelada para que pueda descansar, detalló la Santa Sede. Sin embargo, a partir del lunes retomará el resto de sus audiencias y reuniones programadas.
“El Papa va bien”
El papa Francisco fue hospitalizado el pasado 7 de junio. Se sometió a una operación de tres horas, con anestesia general, para reducir unas dolorosas “adherencias” en su pared abdominal, consecuencia de su operación de colon en julio de 2021.
Durante todo su ingreso hospitalario, el Vaticano fue publicando boletines de salud diarios para enviar un mensaje tranquilizador, mencionando una “evolución regular”, un buen cuadro clínico y unos “análisis de sangre normales”. “El Papa va bien. Está mejor que antes”, dijo su cirujano, Sergio Alfieri, que lo saludó a su salida.
Con problemas de cadera, dolores de rodilla, varias operaciones y una infección respiratoria en su historial, el Papa argentino ha sufrido problemas recurrentes de salud desde su elección en 2013.
*Con información de AFP