Un niño de 10 años murió en un tiroteo en un barrio de Nimes, en el sur de Francia, especialmente dominado por los narcos, indicaron este martes autoridades. “El niño murió anoche a causa de un intercambio de disparos ocurridos en el barrio de Pissevin, en el oeste de Nimes. Un hombre fue también víctima de disparos, pero su vida no parece correr peligro“, declaró la fiscal Cécile Gensac.
Según fuentes policiales, el menor se encontraba en la parte posterior de un vehículo que fue blanco de disparos cuando circulaba por ese barrio hacia las 23:30 hora (locales). Falleció tras ser llevado a un hospital de la ciudad. Además, se informó que el hombre que resultó herido en el tiroteo es el tío del menor, quien conducía el vehículo. Otro niño que se encontraba en el vehículo, este de siete años de edad, salió ileso del incidente.
La fiscal Gensac aclaró que la familia de la víctima no está relacionada con el tráfico de drogas. “La familia de la víctima no ha estado para nada asociada, ni antes ni actualmente, con hechos de naturaleza penal”, y “su única desgracia fue pasar por el mal sitio en el mal momento”, indicó.
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“No quedará impune”
La fiscal confirmó que el tiroteo estaba relacionado con la competición por la venta de droga en la zona. Fuentes policiales indicaron a su vez que cuatro personas, actualmente en fuga, habrían protagonizado los disparos.
A su vez, el ministro francés del Interior, Gérald Darmanin, dijo poco antes que el incidente parecía obedecer a un “ajuste de cuentas entre traficantes”, y prometió que “no quedará impune”.
El exfiscal de Nimes, Eric Maurel, afirmó que esta ciudad se ha convertido en una “central de compra de drogas”. Y es que cada semana, según sostiene, transitan por ahí unos 700 kg de resina de cannabis, principalmente del norte de África, y decenas de kilos de cocaína procedente de Sudamérica a través de España.
*Con información de AFP