Luego de que fuera disuelta una manifestación pacífica se realizaba en la Plaza de la Constitución por la vía del gas lacrimógeno, dicho lugar se convirtió en una zona colmada de actos vandálicos.
Estos fueron provocados por un grupo de “infiltrados” que se integró en un momento en la protesta que se llevaba a cabo sin ningún incidente frente al Palacio Nacional de la Cultura.
No obstante, cuando este grupo llegó al lugar, lanzaron piedras en contra de los agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) que resguardaban y estos tuvieron que disuadir a los provocadores con gas lacrimógeno.
Actos vandálicos
Al lugar se hicieron presentes elementos de los Bomberos Voluntarios para sofocar las llamas que fueron causadas en el Portal de la Sexta, el cual también fue saqueado.
Los vándalos que destruyeron este monumento se llevaron varios artículos, incluyendo obras de arte.
En el lugar también fueron atendidas por los socorristas ya que presentaban cuadros de intoxicación derivado del gas lacrimógeno y del humo de las llamas.
Un vehículo de los Bomberos Voluntarios también sufrió del vandalismo, ya que el windshield fue objeto de pedradas al momento de su llegada, aunque soportó las mismas pero quedó con fisuras, según confirmó uno de los oficiales.
También se confirmó que dos personas fueron trasladadas hacia un hospital, pero unas 15 más fueron atendidas en el lugar.
Más capturas
Por su parte, el Ministerio de Gobernación confirmó que se realizaron más capturas en el Centro Histórico, específicamente en el Paseo de la Sexta, en donde varios individuos realizaban saqueos en comercios.