“Milagro” en una autopista de Estados Unidos: un hombre apareció vivo atrapado en su camioneta casi una semana después de haberse accidentado y habiendo sobrevivido a base de agua de lluvia, cuando dos pescadores encontraron los restos de su vehículo.
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Dos hombres estaban pescando en un río del estado de Indiana, fronterizo con Canadá, el martes, cuando vieron algo brillante en la corriente de agua que pasa debajo de la Interestatal 94, la autopista que une la región de los Grandes Lagos con las llanuras del norte de Estados Unidos.
Al acercarse, se dieron cuenta de que había un hombre atrapado detrás de un airbag. “En cuanto le toqué el hombro, se dio la vuelta, se estaba despertando. Estaba vivo y muy contento de vernos”, declaró en rueda de prensa Mario García, que había salido a pescar con su yerno. “Nunca había visto a nadie tan aliviado”.
Inmediatamente llamaron a los servicios de emergencia, que intervinieron con dificultad: las imágenes difundidas por la policía mostraban el vehículo incrustado en un terraplén entre el río y las bases del puente.
Luego, el conductor, de 27 años, fue trasladado en helicóptero a un hospital cercano, donde los paramédicos informaron que presentaba “heridas graves” y su pronóstico era de vida o muerte, según explicó Glen Fifield, de la Policía Estatal de Indiana, en una rueda de prensa celebrada el martes por la noche.
“Es un milagro que este hombre esté vivo hoy, y que estos dos señores hayan llegado hasta este arroyo”, añadió.
Camioneta estaba bajo de un puente
Por una razón aún por determinar, la camioneta acabó bajo el puente de la autopista por la que circulaba. Su estructura era casi imposible de ver desde la carretera, según las autoridades.
El conductor contó a los buenos samaritanos que le rescataron que llevaba allí atrapado desde el pasado miércoles, casi una semana, y que no podía encontrar su teléfono. “Dijo que había estado gritando, chillando, pero que nadie podía oírle”.
Y aunque probablemente debe su salvación a las templadas temperaturas del fin de semana de Navidad de este año, el frío llegaría el martes por la noche, y “probablemente no iba a aguantar ni un día más”, declaró García a la televisión estadounidense.