PARTE 2
Muchas veces pasamos por experiencias en las que hay un trámite por hacer y no estamos al tanto de ello. Por eso le hago estas preguntas: ¿Cuando un ser querido muere inesperadamente, sabe usted cuáles son los trámites del funeral y del entierro que hay que hacer? ¿Sabía que la única forma en que se pueden donar los órganos de un ser querido es si lo declaran con muerte cerebral? Ahora bien, imagínese usted que la muerte es lo único seguro que tenemos al nacer y hay veces en que no se nos ocurre conocer los trámites por hacer. Ahora, ¿cómo podríamos prepararnos para saber qué hacer si a una hija, hermana, amiga o conocida la violan o si ha sido objeto de un abuso o agresión sexual? Pues bien, aquí le comparto detalles importantes que es necesario tener en mente para no caer en el error de falta de conocimiento y quedarnos, como decimos en el buen chapín, en gallo.
Pues bien, al momento de reaccionar, una vez el agresor se haya ido, estos serían los pasos a seguir para la denuncia respectiva:
1. Llamar a la persona más cercana con afinidad y de confianza, sea familiar o amiga.
2. Es importantísimo NO bañarse, NI limpiarse (pues allí están las pruebas), de preferencia NO cambiarse de ropa hasta después de los exámenes pertinentes.
3. No mover nada en la escena de los hechos.
4. Llamar a la Policía Nacional Civil para que lleguen al lugar de la escena. Ellos deberán hacer la denuncia ante el Ministerio Público (MP).
5. Al llegar la policía y el MP al lugar donde el agresor cometió sus fechorías, es importante que capten y documenten todas las pruebas necesarias, que se tengan claras las evidencias del crimen por medio de fotos y que tomen nota de todos los detalles que se pueda, o sea de todo, tanto del lugar, detalles del área específica y, muy importante, fotos de la víctima (información que es necesario leer, revisar y verificar sobre la denuncia realizada). La primera denuncia que queda registrada es cuando se llama a la policía.
Ya que se hizo todo lo necesario para documentar tanto a la persona afectada como al lugar, la misma policía debe trasladar a la víctima, junto con la persona afín que le dará apoyo en todo sentido, al hospital nacional más cercano, y allí la recibirán en la clínica de atención a víctimas, si es que hay quien la atienda.
Es necesario e importante enfocarse en:
1. Llevar DPI de la persona que sufrió la agresión, celular y su cargador, dinero en efectivo, botellas de agua pura, una manta, etc., pues este trámite dura casi las 10 horas mientras se completan los nueve testimonios por hacer. Se puede decir que el apoyo burocrático y psicológico es casi nulo.
2. Ya en la clínica, deberá asegurarse de que se realice el protocolo SVET (Secretaría contra la Violencia sexual, Explotación y Trata de personas) –teléfono 2504-8888–, este protocolo incluye un botiquín con todos los antibióticos, antirretrovirales, etc., que corresponden al poscuidado después de una violación. Cabe mencionar que Guatemala es uno de los pocos países que apoya a la víctima con este tipo de protocolo.
3. También es superimportante saber que se tienen 72 horas para poder conservar las diferentes evidencias biológicas del agresor.
4. Lo más importante por hacer, y que la vergüenza, los chismes, las trampas y las mentiras no le ganen a la verdad, es denunciar al agresor ante la policía y aguantar el proceso que corresponda. ¡Ya no hay que callar! Hay que denunciar sin pensar en las consecuencias, aunque haya amigos o familia que le den la espalda a la persona afectada por hacer una denuncia pública; hay que seguir el camino y no permitir que nos sigan pisoteando estos agresores humanos.
Desde ya les digo: “Gracias, mujeres esforzadas y valientes que denuncian, con coraje y valentía, son parte de ese 2% que cada día, al tomar más conciencia, subirá y más mujeres se atreverán a denunciar y ser ejemplo de que la unión hace la fuerza”. Aunque sepan que posiblemente recibirán el rechazo y las o los rechazarán en su actuar de parte de algunos miembros de su familia y de los que se consideraban sus amigos. Pero y entonces, yo me preguntaría: ¿Serían realmente sus amigos con todo el respeto que se merecía la amistad al hacer la denuncia? ¿Sus familiares que rechazan el actuar de los que se atreven a denunciar estarán despiertas o despiertos en la conciencia de la vida? Se lo dejo, amiga y amigo lector, para que solo usted en su intimidad pueda reflexionar y elegir qué haría en este tipo de caso maléfico en pleno siglo XXI, si le tocara a su hija, hijo, hermana, hermano, amiga, amigo o incluso a su propia mamá, una experiencia tan cobarde como la violación o el abuso sexual.