Durante siglos, los cuervos han sido rodeados de un aura de misterio. Desde presagios de muerte hasta mensajeros de otros mundos, estas aves negras han protagonizado todo tipo de leyendas. Pero, ¿cuánto de eso es real y cuánto es mito?
Uno de los mitos más extendidos es que los cuervos traen mala suerte. Esto proviene de tradiciones medievales y religiosas donde el color negro se asociaba con la muerte. Sin embargo, en otras culturas, como la nativa americana o la celta, los cuervos eran vistos como sabios, protectores o incluso dioses transformados en ave.
También se cree que los cuervos solo se alimentan de animales muertos, reforzando su imagen macabra. En realidad, son omnívoros muy adaptables: comen frutas, insectos, pequeños animales y sí, también carroña si es lo que hay disponible.
Por último, muchos los ven como simples aves ruidosas, pero los estudios han demostrado que los cuervos son de las criaturas más inteligentes del reino animal. Son capaces de usar herramientas, resolver problemas complejos y reconocer rostros humanos, incluso después de años.
Así que la próxima vez que veas uno, tal vez no sea un mal augurio… sino un visitante curioso con muy buena memoria.