En marzo de 2020, millones de guatemaltecos fueron confinados a sus hogares a causa de la pandemia del Covid-19, observándose imágenes nunca vistas y que difícilmente se repetirán: calles vacías. Cuatro años después, salir de sus hogares a las 3:30 de la madrugada para llegar a tiempo a sus destinos o regresar cinco horas después de finalizar la jornada es la dinámica diaria para los vecinos del departamento central.
En ese lapso, más personas adquirieron vehículos para movilizarse de forma independiente y el transporte público redujo sus flotillas. Aunado a ello, en 2024, todos los alumnos de diferentes niveles del sector público y privado retomaron las clases presenciales, así como la Universidad de San Carlos de Guatemala, tomada desde 2022.
¿Más vehículos?
Según la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), al 31 de diciembre de 2023, el parque vehicular se situaba en 5.2 millones. Un año antes el registro era de 4.8 millones de automóviles, es decir, en el lapso de un año los guatemaltecos adquirieron 436,979 vehículos más.
Del total, 882,134 corresponde a vehículos livianos y 2,463,238 a motocicletas, transporte que se ha popularizado en las últimas décadas por su precio accesible, facilidad de manejo y costo menor para combustible y mantenimiento.
El Departamento de Tránsito de la Policía Nacional Civil (PNC) sitúa a ese tipo de vehículo entre uno de los más riesgosos, ya que en un 48% de los hechos de tránsito están involucrados pilotos de motocicletas.
Complicaciones diarias
Amílcar Montejo, portavoz vial de la Municipalidad de Guatemala, explicó que el inicio de las actividades educativas en el sector público provocó un aumento del tránsito lento y los viajes de automovilistas o unidades de transporte colectivo.
“Aumentan los viajes, el tránsito lento, por supuesto el riesgo y vulnerabilidad”, recalcó. Regular el tráfico en la capital recae en 850 agentes de la Policía Municipal de Tránsito (PMT) y en 5 mil unidades de señalización, agregó.
La PMT proyecta con ese nuevo escenario un promedio de 1.2 millones de vehículos circulando a diario en la ciudad. Las complicaciones aumentan con los hechos de tránsito, de violencia y los automóviles varados por desperfectos mecánicos; la regulación vial en áreas donde se ubican centros educativos tiene su propia dinámica.
“La acción de poder dejar a nuestros hijos frente a las áreas educativas no debería tardar más de 20 a 25 segundos. En ese sentido, se toman algunos tiempos y monitoreo. La probabilidad es que por diferentes circunstancias ajenas podríamos tardarnos entre un minuto o dos minutos”, detalló.
El costo
Jorge Benavides, de la Fundación para el Desarrollo (Fundesa), explicó recientemente en su cuenta en la red social X que, debido a la falta de inversión en una nueva red vial y el aumento del parque vehicular, para el departamento de Guatemala, la relación entre vehículos y kilómetros de red vial se ha cuadruplicado en 20 años, es decir, por cada kilómetro de red vial hay 4 veces más vehículos.
La misma organización situó en un estudio reciente los efectos del tiempo que pasan los guatemaltecos en el tráfico sobre la competitividad, concluyendo que esto les puede representar hasta Q39 diarios y Q50 más en combustible.
El presidente, Bernardo Arévalo, previo a tomar posesión, en una reunión con Ricardo Quiñónez, alcalde de la capital, abordaron la necesidad de construir en conjunto un metro como una de las medidas para reducir las complicaciones que enfrentan los vecinos para sus traslados.