“Este es un plan criminal multimillonario, fue complejo, orquestado. No estamos hablando de hurtos comunes”, así lo dijo el fiscal general de California, Rob Bonta, luego de la detención de una madre de familia por dirigir una red de reventa de maquillaje en línea que robaban en prestigiosas tiendas de Estados Unidos.
Según New York Post, Michelle Mack, de 53 años y madre de tres hijos, comandaba la organización ‘Chicas de California’, que contrataba a mujeres para que robaran en tiendas como Sephora, Ulta, Macy’s, Bloomingdale’s, Prada, Bath & Body Works, Victoria’s Secret, Luxottica’s Sunglass Hut y LensCrafters. Almacenaba los productos robados en su mansión de 4.500 pies cuadrados y 2,75 millones de dólares, ubicada en las estribaciones de San Diego. Desde allí, los vendía en línea y con eso logró robar casi ocho millones de dólares en varios estados del país.
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Entre los productos robados, no sólo había maquillaje, sino también bolsos, gafas, de cuidado facial, perfumes y accesorios de moda, los cuales decomisaron en su mansión. Las investigaciones determinaron que Mack pagó hasta a 12 mujeres para que robaran en tiendas y después, vendía estos productos robados por Amazon.
No sólo operaban en California, sino Florida, Massachusetts y Ohio, informó el citado medio en base a CNBC.
Más de 10 mil artículos recuperados tras robo en California y otros estados
The Post notificó que durante el procedimiento de detención, las autoridades decomisaron casi 10 mil artículos robados, valorados en más de 387 mil dólares, en la lujosa mansión de California, donde residía Mack.
Los objetos robados estaban organizados como si estuviesen en una tienda y muchos estaban empacados, listos para enviar a sus clientes.
La policía no sólo arrestó a Michelle Mack, sino a su esposo Kenneth Mack y otras siete personas. Los señalan de 140 cargos, algunos de los cuales son robo minorista organizado, hurto mayor y recepción de propiedad robada. Todos defienden su inocencia.
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Entre las pruebas en su contra hallaron tanto los productos como mensajes de texto con los que hablaban sobre sus fechorías en California en otros estados.
“No voy a robar con regularidad. Voy a empezar a llenar mi bolsa rápidamente. Así que también quiero saber cosas que pueda conseguir en grandes cantidades”, “incluso sin Lancome, todavía nos fue bien”, “¿Conseguiste algunas chicas nuevas? Realmente necesito un producto, así que si tienes algo, házmelo saber”. y él le envió un mensaje de texto: “Muchos pedidos, vamos a enviarlos”, fueron algunos de los mensajes que Michelle Mack envió a varias personas como su esposo y socios de su red. Además, hallaron mensajes de su marido, diciendo: “Muchos pedidos, vamos a enviarlos”.