Tras declararse en sesión permanente, los diputados del Congreso de la República iniciarán hoy con la elección de magistrados a Salas de Apelaciones, una tarea compleja y que tomará tiempo, pero vital por su importancia dentro del sistema de justicia.
Los legisladores están convocados para las 10 horas y a diferencia de la elección de Corte Suprema de Justicia se prevé que el proceso tome más tiempo, ya que deben votar para designar a 156 magistrados titulares y 104 suplentes.
La semana pasada, después de varios días de negociaciones los diputados lograron acuerdos para votar de forma rápida y con más de 150 votos por los magistrados que apoyan. Ahora quedará pendiente de verificar si los acuerdos se mantienen.
¿Por qué son importantes?
Juan Pablo Muñoz de la Alianza por las Reformas, explicó que en materia jurisdiccional, las Salas de Apelaciones tienen la facultad de revisar las resoluciones de todos los jueces del país. Ante la posibilidad de un error o injusticia malintencionada, los magistrados tienen la posibilidad de corregirlo, ya sean materia penal, civil, familia, trabajo, administrativo, es decir, cualquier área objeto de litigio.
“En el contexto actual, hemos visto que las Salas de Apelaciones, sobre todo en el ramo penal, han servido para legitimar las resoluciones injustas de muchas y muchos jueces que criminalizan a operadores de justicia, defensores de Derechos Humanos, periodistas y otros. También se han prestado para invalidar las resoluciones de juezas y jueces independientes”, destacó.
Recalcó que la importancia de estos puestos es por la posibilidad que tienen de cambiar el curso de un proceso judicial, ya sea al servicio de la justicia, corrigiendo errores o sumándose a la arbitrariedad del sistema.
“No hay que olvidar que en materia constitucional también conocen en primera instancia amparos, derivado de la ley en la materia, referidos a no pocas autoridades del país. Por ejemplo, de los diferentes registros que forman parte del TSE”, explicó.
Por último, recalcó que solo en Guatemala, a nivel centroamericano, las elecciones de magistrados de Salas de Apelaciones quedan en manos del Congreso. Lo ideal sería que los togados ascendieran a través de la carrera judicial.
Contra viento y marea
La conformación de la nómina de aspirantes a Salas de Apelaciones fue la más compleja, tanto por el tiempo como por la cantidad de candidatos y obstáculos surgidos en el camino, por ejemplo, los múltiples amparos promovidos por aspirantes excluidos que buscaban su incorporación a la lista final.
La organización Pro Justicia calificó como “atípica” la evaluación de los perfiles y cómo esto incidió en el universo de “elegibles”.