La dolorosa escena que los socorristas presenciaron ha generado indignación. La hija menor del principal sospechoso se salvó gracias a la intervención de las autoridades.
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La tarde de este miércoles 18 de diciembre se registró un hecho de violencia residenciales Los Olivos, zona 2 de San José Villa Nueva.
La paz del lugar se vio interrumpida esta tarde luego vecinos escucharon disparos en el interior de una vivienda, por lo que decidieron dar aviso a las autoridades que de inmediato llegaron al lugar a ver que sucedía.
Al tocar la puerta y no recibir respuesta, los agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) decidieron ingresar al domicilio.
Al entrar, localizaron a un hombre frente a los cadáveres de su esposa, que yacía en su cama, mientras el cuerpo de su hijo de 11 años fue localizado en el piso de la habitación.
Según la versión de la PNC, el hombre aún sostenía el arma que habría utilizado para cometer el crimen y al ver a las autoridades intentó darse a la fuga.
Las víctimas fueron identificadas como María Fernanda Fuentes Marroquín, de 32 años, y su hijo Fernando Fuentes Quevedo, de 11 años. Además, resultó herida la menor Violeta Quevedo, de 8 años, quien fue trasladada de urgencia a un hospital en Bárcenas, donde recibe atención médica.
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Mientras que el sospechoso del crimen, Luis Osmar Quevedo Del Cid, de 48 años, fue detenido y trasladado a la Torre de Tribunales para solventar su situación legal.
¿Qué sucedió?
Testigos del crimen aseguraron a las autoridades que Quevedo habría actuado tras un ataque de celos, utilizando un arma de fuego, calibre 9 mm. También aseguraron que si los agentes no derriban la puerta e ingresan al domicilio, posiblemente la niña estuviera sin vida. Agregaron que el hombre se encontraba bajo efectos de alguna droga y tenía varias armas en el domicilio.
