El Ministerio Público convocó a una conferencia de prensa ayer viernes 20 de diciembre para dar a conocer resultados preliminares de la diligencia de allanamiento, inspección, registro y secuestro de evidencia que se ejecutó en el kilómetro 94.5, aldea El Amatillo, Oratorio, Santa Rosa.
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El licenciado Erick Eduardo Shaeffer Cabrera, secretario General en funciones, dijo que este es un operativo a gran escala para combatir la trata de personas en nuestro país, enfocado en la protección de la niñez guatemalteca.
Explicó que se realizó en seguimiento a una serie de denuncias y está dirigido contra individuos señalados de cometer delitos graves, como la trata de personas. Resaltó que, en ningún momento, se trata de una acción en contra de una comunidad religiosa o un sector en particular, pero enfatizó que la ley es clara y nadie es inmune a ella.
“Se han establecido coordinaciones con la comunidad judía guatemalteca para asegurar que se cubran las necesidades humanitarias de los niños afectados, garantizando su seguridad y protección durante todo el proceso”, indicó.
Posteriormente, el fiscal regional metropolitano, magíster Dimas Jiménez y Jiménez, externó que se sospecha que estos delitos habrían sido cometidos por un integrante de la comunidad Lev Tahor contra menores de edad pertenecientes a esa comunidad. Por lo tanto, de manera preliminar se rescató a 85 de ellos y se deberá establecer si sufrieron algún maltrato.
MENORES DE EDAD ESCAPAN
Entre tanto, la licenciada Nancy Lorena Paiz, encargada del despacho de la Fiscalía contra la Trata de Personas, relató que el 11 de noviembre pasado escaparon cuatro menores de edad de esa comunidad y se presentaron al Modelo de Atención Integral de Niñez y Adolescencia (MAINA) y, tras recibir sus declaraciones, el caso fue trasladado a la Fiscalía contra la Trata de Personas.
Luego de escuchar sus testimonios y hacer exámenes médicos forenses, establecieron que efectivamente hay modalidades de trata de personas, como matrimonio forzado y delitos conexos.
