Un batiscafo de recreo que transportaba a 45 turistas rusos, incluidos menores de edad, se hundió este jueves a un kilómetro de la costa de Hurghada, Egipto, durante una excursión para observar arrecifes de coral. El accidente dejó al menos seis fallecidos (todos rusos) y 21 heridos, según confirmaron autoridades locales y el Consulado General de Rusia en la zona.
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38 turistas rusos, de los cuales 24 fueron trasladados a hoteles y 14 hospitalizados, aunque sin “estado de gravedad”.
Las autoridades aún buscan a varios pasajeros, mientras equipos de rescate rastrean la zona.
El gobernador del Mar Rojo, Amr Hanafi, confirmó seis fallecidos, todos de nacionalidad rusa.
El batiscafo Sindbad, operado por un hotel homónimo, realizaba una excursión submarina rutinaria cuando naufragó por causas aún desconocidas. Testigos y medios locales reportaron que a bordo viajaban familias enteras, incluidos 20 menores.
El consulado ruso en Hurghada activó protocolos de emergencia.
Los diplomáticos se trasladaron al muelle del Hotel Sindbad para coordinar con las autoridades egipcias.
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Se inició una investigación para determinar las causas del hundimiento, mientras se brinda asistencia a los sobrevivientes.
