Un escalofriante caso de terrorismo doméstico ha conmocionado a Estados Unidos después de que autoridades federales revelaran que Nikita Casap, un adolescente de 17 años de Wisconsin, habría asesinado a sus padres como parte de un complot para asesinar al expresidente Donald Trump y derrocar al gobierno.
PUBLICIDAD
Según documentos judiciales desclasificados, Casap dejó evidencia escrita de sus planes, incluyendo un manifiesto que pedía el asesinato de Trump para “salvar la raza blanca” y provocar una revolución política. Los investigadores encontraron en su teléfono referencias a “La Orden de los Nueve Ángulos”, un grupo neonazi, junto con imágenes de Adolf Hitler y consignas supremacistas.
Las autoridades creen que Casap asesinó a su madre, Tatiana Casap, y a su padrastro, Donald Mayer, el 11 de febrero, aunque los cuerpos no fueron descubiertos hasta el 28 de febrero durante una visita de bienestar. Tras el crimen, el adolescente habría robado el vehículo de Mayer, donde fue arrestado en Kansas con $14.000 en efectivo, joyas y un revólver.
Además de los cargos estatales por homicidio, Casap enfrenta acusaciones federales, incluyendo magnicidio y conspiración terrorista. El FBI encontró en su teléfono investigaciones sobre ataques con drones y explosivos, así como datos bancarios robados. Un compañero de clase declaró que Casap había confesado sus planes de matar a sus padres y huir a Ucrania, donde esperaba evadir la justicia.
Casap, quien aún no se ha declarado, enfrentará una audiencia el 7 de mayo.
