El Trastorno por Déficit de Atención (TDA) es una condición neurológica que afecta la capacidad de concentración y organización. A diferencia del TDAH (que incluye hiperactividad), el TDA se caracteriza principalmente por problemas de atención sin impulsividad extrema.
Las personas con TDA pueden tener dificultades para seguir instrucciones, completar tareas y recordar detalles importantes. Esto puede afectar su rendimiento escolar, laboral y su vida cotidiana. Sin embargo, con estrategias adecuadas, como terapia y técnicas de organización, es posible manejarlo de manera efectiva.
El diagnóstico temprano es clave para desarrollar herramientas que ayuden a quienes lo tienen a aprovechar su potencial. Si bien el TDA puede representar un desafío, también está relacionado con una gran creatividad y pensamiento innovador en muchas personas.