"Jamás sufrí ninguna presión para intervenir de cualquier forma para orientar políticamente" la recolección de informaciones, dijo el Director Nacional de Inteligencia, Dan Coats, durante la audiencia del comité el Senado de Estados Unidos sobre asuntos de inteligencia.
Por su parte, el director de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA), el almirante Michael Rogers, señaló que "nadie me ha pedido que haga algo ilegal, inmoral, poco ético o inapropiado".
La comisión de Inteligencia del Senado toma este miércoles los testimonios de jefes de inteligencia en medio de una polémica por la supuesta presión de Trump sobre esos órganos de seguridad.
Un artículo publicado este miércoles en el diario The Washington Post afirmó que la Casa Blanca había presionado a Coats y Rogers para que nieguen cualquier eventual colusión del comité de campaña de Trump con Rusia durante la campaña electoral de 2016.
Sin embargo, Coats y Rogers se negaron a ofrecer detalles de eventuales conversaciones con Trump alegando que se trata de información confidencial, un gesto que motivó la visible ira de los senadores.
El senador conservador Marco Rubio no logró contener su irritación:
Coats apenas respondió:
Por su parte, Rogers adoptó un tono desafiante:
El senador Angus King preguntó a Coats sobre la "base jurídica" para negarse a ofrecer detalles a la comisión, y el funcionario admitió "no estar seguro de tener una base legal" para no responder.
Además de Coats y Rogers, los senadores interrogaron este miércoles al director interino del FBI, Andrew McCabe, y al Fiscal General Adjunto, Rod Rosenstein.
Sin embargo, el testimonio más esperado será el jueves en la mañana, cuando los senadores interroguen al ex director del FBI, James Comey, quien habría sugerido en un memorando interno presiones directas de parte de Trump.