El presidente francés, Emmanuel Macron, prometió este domingo en Bamako ayudar a los países del G5 Sahel (Malí, Níger, Burkina Faso, Mauritania y Chad) a obtener financiación para su fuerza conjunta, instándoles a su vez a demostrar eficacia frente a los yihadístas.
"Depende de ustedes y de sus ejércitos convencer de que el G5 puede ser eficaz, dentro del respeto de las convenciones humanitarias", dijo Macron en la apertura de la cumbre del G5 Sahel en Bamako.
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En la cumbre participan los presidentes Ibrahim Boubacar Keita (Malí), Idriss Déby Itno (Chad), Mohamed Uld Abdelaziz (Mauritania), Roch Marc Christian Kaboré (Burkina Faso) y Mahamadu Isufu (Níger).
Desplegada inicialmente en los confines de Malí, Burkina Faso y Níger, la fuerza del G5 se sumará a la operación francesa Barkhane de lucha contra los yihadistas en el Sahel, y a la Misión de la ONU en Malí (Minusma).
La fuerza regional debe comenzar con unos 5 mil efectivos proporcionados por los cinco países, con la idea de duplicar dicha cantidad más adelante.