El juez séptimo penal, Adrián Rodríguez, se presentó este lunes en Torre de Tribunales en aparente estado de ebriedad.
Cuando fue abordado por periodistas, Rodríguez los insultó y se tapó el rostro con sus manos.
El juzgador caminó entre los vehículos, en el sótano de Tribunales, y se refugió en el área de mensajería.
Rodríguez se excusó para acudir a una consulta en el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social, por lo que se nombró a un juez suplente. Al menos ocho audiencias no se pudieron realizar por su ausencia.
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¿Será sancionado?
Marlon López, presidente de la Asociación de Jueces y Magistrados, indicó a Emisoras Unidas que de confirmarse que el juzgador se presentó en estado de ebriedad podría ser sancionado. Por tratarse de una falta grave o gravísima, el juez Rodríguez podría ser sancionado e incluso aplicaría una eventual destitución.
Señalado por MP y CICIG
El juzgador fue señalado por el Ministerio Público (MP) la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) en el caso denominado “Traficantes de influencias”.
El pasado 14 de febrero, la Corte Suprema de Justicia dio trámite a la solicitud de antejuicio contra el juzgador señalado de los delitos de prevaricato y denegación de justicia.
De acuerdo con las autoridades, los hallazgos detallan que el oficial de audiencias Ernesto Caal Caal “apoyaba” al juez para que el Ministerio Público no tuviera avance en la persecución penal.
El caso
Una trama de corrupción por el trámite “express” y “eficiente” en la devolución de crédito fiscal involucró al juez Rodríguez, a un diputado y a un excandidato a la vicepresidencia por la agrupación política Unidad Nacional de la Esperanza (UNE). La investigación surgió el 16 de abril de 2015 cuando fue desarticulada la estructura del caso “La Línea”.