Horas antes de que se presentara el anteproyecto del presupuesto para 2020, el ministro de Finanzas, Víctor Martínez, gestionó ante la Junta Monetaria el visto bueno para los bonos del Tesoro que se incluyeron en la propuesta.
El proyecto de presupuesto deberá ser aprobado por el Congreso a más tardar el 30 de noviembre.
El funcionario explicó que para el próximo año se estima financiar el presupuesto con Q17 mil 238 millones por medio de bonos del Tesoro, los cuales tienen destino específico.
A la vez, se estima renegociar deuda por Q5 mil 644 millones.
La deuda aprobada para el periodo actual con bonos fue de Q14 mil 207 millones, lo que significará un aumento de más de Q3 mil millones.
“Es un déficit de 2.4%, pero el año pasado fue de 2.5%, y lo estamos sustituyendo. Anteriormente se financió con saldo de caja”, mencionó Martínez al consultarle si era el más elevado en los últimos años.
También hay créditos
El ministro de la cartera del Tesoro entregó el proyecto de presupuesto al presidente del Congreso, el cual contiene financiamiento con la contratación de deuda a través de préstamos.
Martínez indicó que se incluyen seis créditos, también con el aval de la Junta Monetaria para que puedan ser aprobados por los diputados.
De acuerdo con Finanzas, los préstamos serán de US$30 millones para el Ministerio Público, US$300 millones para el sector de justicia.
Adicionalmente, hay US$250 millones para apoyo presupuestario, otro por US$200 millones para contingente de emergencias. También hay US$100 millones para infraestructura hospitalaria y US$150 millones para red vial.
Entidades con más asignaciones
- El proyecto de presupuesto elaborado por Finanzas contempla Q17 mil 771 millones para Educación, Q8 mil 198 millones para Salud.
- Otros ministerios con más fondos son Gobernación con Q5 mil 469 millones y Q5 mil 49 millones para Comunicaciones.
- Y para la Defensa se le asignan Q2 mil 828 millones.
“Reto central es mejorar la recaudación”, análisis de Erick Coyoy, analista independiente
Uno de los retos centrales de la nueva administración es que la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) es alcanzar la meta de recaudación, pues en los últimos años no se ha logrado.
Aunque el déficit fiscal se mantiene moderado en relación de la deuda con el producto interno bruto.
Pero el mismo ministerio está consciente en que los ingresos fiscales crecen poco y por debajo de la meta, pues la deuda se acerca al límite superior a lo que se recomienda. Pues se está acercando al límite superior y se necesitan dos años y medio de ingresos para pagar el endeudamiento.
En los próximos años se debe estar atento a que la SAT mejore su desempeño y a mediano plazo. Así como reducir el endeudamiento nuevo, porque es una alternativa debido a la baja recaudación, la cual no es sostenible en el corto plazo y hacer una maniobra a partir de 2021 en el ente recaudador.