El gobierno provisional de Bolivia dio un giro radical a la "política exterior extraviada" de la administración de Evo Morales, al anunciar que su país restableció relaciones con Israel, rotas desde 2009.
La idea del gobierno transitorio de Jeanine Áñez, que asumió por sucesión constitucional tras la renuncia de Morales, ahora exiliado en México, es "rectificar todo lo malo que hizo el anterior gobierno", dijo en conferencia de prensa la canciller Karen Longaric.
"Lo menos que se podía esperar de este gobierno era rectificar la política exterior, una política exterior extraviada y que no atendía a los intereses propios del Estado y era altamente ideologizada".
Cinco años después de la ruptura por causas políticas, y en el afán de rehacer la política de Morales, Longaric anunció el restablecimiento de relaciones con Israel.
Su homólogo interino israelí, Yisrael Katz, acogió "con satisfacción" esa decisión.
Relaciones con Estados Unidos
Bolivia se propone "fortalecer las relaciones con Estados Unidos", para lo que designó el martes al embajador Oscar Serrate.
El gobierno transitorio fue reconocido por el presidente estadounidense, Donald Trump.
En 2008, Morales expulsó al entonces embajador estadounidense, Philip Goldberg, acusándole de apoyar a un movimiento de derecha que supuestamente pretendía escindir Bolivia.
Washington expulsó en reciprocidad al representante de La Paz.
Luego el exgobernante boliviano echó también del país a la agencia antidrogas DEA y al organismo de cooperación USAID.
Durante la crisis diplomática, Estados Unidos colocó a Bolivia en una lista de países que no cumplían sus compromisos de lucha contra el narcotráfico y en 2014 la retiró del programa de beneficios comerciales y arancelarios ATPDEA, según sus siglas en inglés.
China y Rusia
En cambio, al mencionar las relaciones con China y Rusia, socios comerciales de Bolivia durante el gobierno de Morales, Longaric dijo que corresponde "fortalecerlas", pero también reconducirlas, redireccionarlas y velar por los intereses del país protegiendo los recursos naturales.
Con China, que desarrolla en el país negocios como la minería y la construcción, Bolivia mantiene un déficit comercial que el año pasado alcanzó los 1.617 millones de dólares.
Pekín le otorgó, además, un crédito por 10 mil millones de dólares.
Con Rusia, además, el país desarrolla varios proyectos con Gazprom, que se adjudicó la explotación de al menos dos megacampos para avanzar en el cambio de la matriz energética de todo su parque de buses públicos, de diésel a GNL y GNV.
También trabaja en un proyecto para un complejo de energía atómica con fines medicinales y agroindustriales, que ha desencadenado una fuerte oposición en Bolivia.
México
En cuanto a México, país que otorgó asilo a Morales, Longaric descartó que el actual gobierno vaya a romper relaciones diplomáticas con ese país.
"No creo que este 'impasse' por los asilados políticos llegue a ese extremo", dijo Longaric, respecto de la negativa mexicana de dar cumplimiento al pedido de la fiscalía boliviana de que entregue a los exministros Juan Ramón Quintana y Vilma Alanoca.
Sobre Quintana, extitular de la Presidencia y mano derecha de Morales, pesa una orden de detención por "sedición, instigación pública a delinquir, terrorismo y financiamiento al terrorismo"; y sobre Alanoca, de Cultura y Turismo, por "instigación a delinquir".
Según Longaric, "la actitud del gobierno de México va a ir suavizándose y va a comprender que efectivamente pesan sobre algunos asilados acusaciones muy serias sobre delitos muy graves".
*Con información de AFP