Justin Bieber y Hailey Baldwin ya se había casado el año pasado; sin embargo, este lunes 30 de septiembre se juraron amor eterno en una íntima ceremonia rodeados de su familia y amigos más cercanos.
La pareja organizó una gran fiesta para celebrar, ahora sí por todo lo grande, pese a los rumores que señalaban que se divorciarían. El evento se llevó a cabo en la Somerset Chapel, que es parte del exclusivo resort Montage Palmetto Bluff, en Carolina del Sur.
El cantante publicó en su cuenta oficial de Instagram una imagen de un reloj que, que según dijo se había comprado él mismo como "pequeño regalo de boda".
La revista People aseguró que algo más de 150 personas presenciaron el nuevo “sí, quiero” por parte de la pareja.
Entre los invitados figuraban las modelos Kendall y Kylie Jenner, Camila Morrone y Joan Smalls, así como el representante de Bieber, Scooter Braun y Jaden Smith.
El portal TMZ, por su parte, aseguró que también se esperaba la presencia en esta gran fiesta de músicos como Travis Scott, Usher o Ed Sheeran.
Más detalles
Según revelaron medios internacionales, los esposos disfrutaron de un ambiente mágico debido a que el sitio tiene ventanas arqueadas, que dan hacia el este, por lo que la luz del atardecer se filtra de una forma “espectacular”, mientras el pastor Judah Smith los unió.
Previo a la ceremonia, durante una hora, se sirvieron todo tipo de cócteles.
Luego de escuchar el intercambio de votos, los invitados pudieron brindar con champaña a la salud de los recién casados, para después dirigirse al Willson Ballroom, de 650 metros cuadrados, que se dividió en cuatro partes para mayor intimidad y para que la fiesta fluyera entre cada espacio.
Ella utilizó un deslumbrante vestido con hombros descubiertos y un voluminoso velo, luego hizo un cambio y en la primera fotografía que el cantante subió con su esposa, se aprecia que su pelo estaba recogido en un moño. El vestido también lo cambió, a diferencia del que se vio cuando salió de la iglesia, el de la imagen tiene un escote tipo halter.